¿Piel seca o deshidratada? ¡Tenemos la rutina que buscas!

No hay dos personas iguales, no hay dos pieles iguales. Cada una es tan única como la historia que cuenta, por eso es tan importante abrazar una rutina de cuidado de la piel que se adapte a tus necesidades. Cuando hablamos de piel seca, el viaje puede estar lleno de idas y venidas, pero ¿y si existiera una ruta sin giros ni altibajos? Un camino directo hacia la hidratación y el confort.

Hemos creado una rutina de cuidado especialmente pensada para la piel seca, con un enfoque constante en la hidratación, y vamos a contarte todos los secretos que la rodean. ¿Qué causa la piel seca y cuáles son los consejos esenciales para cuidarla? Toma nota, empezamos.

¿Por qué tengo la piel seca?

Normal, sensible, grasa, mixta o seca, cada tipo de piel está influenciado por factores que escapan a nuestro control, como los genéticos y hormonales, entre otros. Sin embargo, la magia comienza cuando aprendemos a entender y cuidar nuestra piel.

La piel seca anhela agua, pero también un aumento en los suministros de aceites naturales. Estos pequeños guerreros, también conocidos como sebo, son esenciales para mantener la barrera cutánea en pleno rendimiento. ¿Por qué es tan importante? Imagina la barrera como un muro fortificado que rodea tu piel, siendo la primera línea de defensa contra el mundo exterior. Su misión principal es doble: protegerte de los agentes externos al mismo tiempo que mantiene el equilibrio en los niveles de humedad.

Ahora todo tiene más sentido, ¿verdad? En pocas palabras, la barrera cutánea actúa como un guardián que mantiene alejado lo negativo y retiene lo positivo. Pero cuando la piel está seca, esa capa que la rodea se altera y tus células cutáneas pierden parte de su habilidad para retener y reponer el agua.

Piel seca: cómo se ve y se siente

• Es sensible (piensa en picazón, descamación y enrojecimiento).
• Tiene poros apenas visibles.
• Se siente tirante (especialmente después de lavarla).
• Presenta un aspecto mate, sin brillo.

A veces, estos síntomas aparecen en todo el rostro o solo en áreas específicas, como la nariz o las mejillas. Sea como sea, una rutina de cuidado de la piel personalizada puede ayudarte a aliviar la sequedad y te pone en el punto de partida perfecto hacia una piel suave y saludable.

Una rutina paso a paso para la piel seca

Cuando se trata de establecer una rutina de skincare para combatir la sequedad, la clave es simple y directa: ¡hidratación! Busca productos que te ayuden a recuperar la humedad perdida y que mantengan tu piel hidratada durante todo el día.

1. Un aceite limpiador nutritivo

Si notas que tu piel está un poco seca e irritada, elegir un limpiador demasiado fuerte podría empeorar las cosas. ¿Por qué? Los limpiadores agresivos pueden eliminar los aceites naturales de tu piel, dañando aún más su barrera protectora y contribuyendo a la sequedad, la pérdida de hidratación y, en algunos casos, la irritación.

Entonces, ¿qué puedes hacer al respecto? La mejor decisión es optar por un limpiador suave, pero eficaz, que respete los niveles de hidratación de tu piel. Si no sabes por dónde empezar, aquí tienes una pista: el aceite atrae al aceite, lo que lo convierte en la elección perfecta para eliminar incluso los restos de maquillaje resistente al agua y protector solar. Un limpiador en aceite que ofrezca una suave emulsión será el perfect match para cuidar de tu piel seca, tanto durante la limpieza como después.

Nuestra recomendación: Essential Cleansing.

2. Un contorno de ojos hidratante

Nuestra rutina diaria influye en nuestra piel de maneras sorprendentes. ¿Alguna vez has oído hablar del exposoma? Elementos como la polución, la radiación solar, el estrés y las fluctuaciones de temperatura impactan en nuestra piel y sus capas.

De todas las áreas de nuestro rostro, la piel más delicada se encuentra debajo de los ojos. Esta piel fina es especialmente sensible a estos factores estresantes, por lo que la hidratación se convierte en un elemento clave para mantenerla en su mejor forma.

Esta zona suele ser una de las primeras en mostrar arrugas (piensa en todas las emociones que tus ojos expresan a diario). Un contorno de ojos hidratante será la opción perfecta para ayudar a prevenir los primeros signos de envejecimiento. Además, ayudará a suavizar las líneas de expresión asociadas a la deshidratación. Si también te gusta la sensación de frío y el efecto antifatiga, una textura gel-sorbete cubrirá todas las necesidades.

Nuestra recomendación: Hyaluronic Eyes.

3. Un sérum con ingredientes humectantes

Por la mañana y por la noche, un sérum hidratante será tu mejor aliado para recuperar y mantener los niveles naturales de humedad en tu piel. También ayudará a calmarla, ya que una hidratación intensa puede aliviar la sensación de sequedad debida a la deshidratación. ¿Qué debes buscar? Fórmulas que contengan humectantes como el ácido hialurónico o la glicerina.

Pero, ¿qué son exactamente los humectantes? Estos héroes de la hidratación trabajan atrayendo moléculas de agua y uniéndose a ellas, manteniendo así la humedad en la piel. El ácido hialurónico, además, aporta volumen a la piel y ofrece un efecto de relleno, contrarrestando la pérdida de elasticidad. Lo que lo convierte en una de las opciones más utilizadas.

Nuestra recomendación: Hyaluronic Concentrate.

4. La estrella de la rutina: una crema hidratante

Ha llegado el momento de sellar la hidratación y no hay mejor manera de hacerlo que con una crema hidratante adaptada a tus necesidades. Es hora de reducir la pérdida de agua en la piel, proteger tu barrera natural de humedad y hacer que tu rostro se sienta más suave. ¿Cómo? Con una crema hidratante de textura ligera para pieles secas.

Ingredientes como el ácido hialurónico, la vitamina E y el extracto de Camellia japonica ofrecen la combinación perfecta para hidratar intensamente la piel, proporcionar una acción antioxidante y ayudar a prevenir y reducir los signos de la edad.

Nuestra recomendación: Hyaluronic Moisture Normal to dry.

¿Un consejo que no puedes ignorar? Trata tu cuello y escote con la misma atención que prestas a tu rostro. Mantener estas áreas visibles bien hidratadas es clave para conservar su suavidad y flexibilidad.

5. Un fotoprotector solar con beneficios adicionales

En el último paso, no importa qué tipo de piel tengas, porque el protector solar es un elemento imprescindible para todos. Usarlo todos los días protege tu piel de los daños causados por los rayos UV y puede ayudar a prevenir la deshidratación y la sequedad adicionales provocadas por el sol.

¿Sabes qué es lo mejor? Hay protectores solares que ofrecen beneficios adicionales, ya sea para calmar, hidratar o brindar un efecto buena cara. En una rutina de skincare para piel seca, lo ideal es buscar ingredientes que hidraten y calmen, reduciendo así el estrés oxidativo causado por la radiación solar y ayudando a mantener la humedad en tu piel.

Nuestra recomendación: Fusion Water MAGIC SPF 50.

Añade un paso extra en tu rutina de noche

No eres la única persona que se hace esta pregunta: ¿puedo exfoliar mi rostro si tengo la piel seca? La verdad es que la idea de que no deberías hacerlo bajo ninguna circunstancia es un mito común. Siguiendo los consejos y los pasos adecuados, la exfoliación puede ser tu gran aliada.

La regla de oro es evitar los exfoliantes fuertes, ya que pueden irritar la piel con más facilidad y provocar un aumento de la sequedad y el enrojecimiento. La clave para la piel seca es utilizar exfoliantes químicos como los AHA (alfa hidroxiácidos), eso sí, en fórmulas suaves.

¿Te suena el ácido glicólico? Se trata de un exfoliante AHA con propiedades que atraen el agua, lo que significa que en concentraciones bajas es efectivo y muy amable con la piel seca. Puedes añadirlo en tu rutina en forma de sérum o crema, preferiblemente por las noches y en días alternos. Lo ideal es que comiences a usar el ácido glicólico una vez a la semana y luego aumentes su frecuencia si es necesario.

Nuestra recomendación: Glicoisdin 8 Soft, con una textura en crema ideal para la piel seca.

Pero recuerda, la protección solar es un paso obligatorio que no debes olvidar los días posteriores a la exfoliación, ya que tu piel podría estar más sensible de lo normal.

Ya lo has visto, esta rutina proporciona toda la hidratación que tu piel necesita, porque una piel bien cuidada es una piel feliz, sin importar su tipo. Cuídate, mímate y ámate tal como eres. Tu piel cuenta una historia, una historia única que merece todo el amor y cuidado que puedas brindarle.

References:

Hashizume H. Skin aging and dry skin. J Dermatol. 2004 Aug;31(8):603-9. doi: 10.1111/j.1346-8138.2004.tb00565.x. PMID: 15492432.

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