¿Cómo te notas la piel últimamente? ¿Tirante y seca? ¿Algo más sensible de lo habitual? ¿Te ha salido un brote de granos tras probar un producto nuevo?
Si la respuesta es sí a alguna de estas preguntas, es posible que la barrera protectora de tu piel esté dañada. Pero no te preocupes, porque tiene fácil solución.
Para empezar, vamos a contarte todo lo que necesitas saber sobre la barrera cutánea, incluida la forma en que este escudo natural protege tu piel de los agresores diarios. También aprenderás cómo recuperar la función protectora de tu piel para mantenerla en perfecto estado, ¡durante todas las estaciones del año!
Índice de contenidos
La barrera de la piel, ¿por qué es tan importante?
Empecemos por explicar brevemente cuáles son las diferentes capas de la piel: la epidermis, la dermis y la hipodermis.
En primer lugar, está la capa que nos ayuda a aislarnos: la hipodermis. En el medio está la dermis, que proporciona fuerza y flexibilidad, y por último la epidermis: la delgada capa impermeable que te protege de los agentes externos; en ella se encuentra la barrera cutánea (o barrera de hidratación).
¿Por qué es tan importante la barrera cutánea? Podría decirse que es como un muro de ladrillo que actúa como primera línea de defensa de la piel contra el mundo exterior. Los ladrillos (las células) se unen con el cemento (los lípidos y proteínas) para crear un muro (la barrera), cuya función principal es protegerte de los diferentes patógenos, a la vez que equilibra los niveles de humedad de la piel.
Básicamente, la barrera cutánea ayuda a evitar que entre lo malo (como elementos irritantes o contaminación) y a prevenir que salga lo bueno (el agua y los aceites). Y esto no es tarea fácil. Piensa en lo expuesta que está tu piel todos los días a factores como los cambios de temperatura, la radiación UV o la polución. Todos estos elementos externos afectan a tu barrera protectora y pueden dañarla.
¿Cuáles son las características de una barrera cutánea sana?
¿Es posible determinar a simple vista si nuestra barrera cutánea está sana? Le hemos planteado esta pregunta a Albert Navasa, Corporate Medical Marketing Specialist.
‘’Si sientes que tu piel está suave, flexible y bien hidratada, sin descamación o enrojecimiento, es una buena señal’’, nos contesta.
Estas son las características de una barrera protectora de la piel en buen estado:
- Sueles tener suave y libre de descamación.
- Sientes la piel calmada después de usar limpiadores y productos suaves que no contienen ingredientes irritantes.
- No sueles padecer de piel tirante, picazón ni tener reacciones desagradables. Una piel tranquila es señal de salud.
¿Cuáles son los síntomas de una barrera cutánea dañada?
Albert nos lo ha dicho, ‘’cada piel tiene su propia historia, sus desafíos y sus necesidades únicas’’. Por lo tanto, es natural que haya días en los que tu barrera cutánea pueda experimentar sensaciones diferentes.
Estas son algunas señales que pueden indicar que tu barrera cutánea se encuentra en mal estado:
- Sientes que tu piel está irritada, algo que también se percibe en su aspecto, ya que está enrojecida, seca y con descamación.
- De repente, tu piel comienza a reaccionar de manera diferente a tu rutina de cuidado habitual.
- Te notas la piel dañada, quemada o con picazón incluso cuando usas productos suaves o que siempre habías podido usar sin problema.
- Sufres de brotes de granos y parece que tu piel se irrita todavía más después de usar productos para acabar con ellos.
Factores que dañan la barrera de hidratación de la piel
Tal vez estés llegando a la conclusión de que tienes que proteger la barrera de tu piel dándole un cuidado adicional. Pero, antes de nada, es importante entender por qué se ha debilitado. Estas son algunas de las causas más frecuentes. Y empezamos por la principal culpable:
Pérdida de humedad
La pérdida de agua transepidérmica (o TEWL, por sus siglas en inglés) reduce la capacidad de la piel de almacenar la humedad, lo cual reduce la salud de la barrera protectora. Cuando la piel está deshidratada, normalmente se vuelve más sensible o reactiva.
También hemos hablado con Albert sobre ello y recalca su importancia: ‘’Es muy importante porque las variaciones en TEWL pueden señalar problemas en la barrera de la piel, los cuales pueden estar relacionados con enfermedades inflamatorias como la psoriasis y la dermatitis atópica’’.
¿Te estás preguntando a qué se debe este cambio repentino? El clima seco, los limpiadores agresivos y tu tipo de piel son tres factores que pueden provocar esta pérdida de humedad.
Usar más productos de la cuenta
Cuidar la piel es fundamental para que tenga un aspecto sano. Pero hay que tener cuidado con no sobrepasarse.
La exfoliación excesiva y el uso de limpiadores que contienen surfactantes pueden eliminar parte de los aceites naturales de la capa más superficial de la piel. Esto la deja más vulnerable, ya que afecta a su capacidad de protegerse y acaba por dañar la barrera protectora.
Usar determinadas recetas de cosmética casera, los agresivos exfoliantes físicos o seguir una rutina de cuidado de la piel con demasiados productos puede debilitar la barrera cutánea.
El estilo de vida también cuenta
¿Te vas de vacaciones al destino de tus sueños? ¿Se acerca una presentación estresante en el trabajo? El día a día puede afectar a la piel más de lo que crees. A estos factores los conocemos como exposoma e incluyen elementos como la radiación UV, la temperatura, el estrés o la contaminación.
Desafortunadamente, todos estos factores pueden desequilibrar la función protectora de la piel. Un ejemplo común de esto es tener la piel seca y tirante cuando bajan las temperaturas. El cambio repentino a días más secos y fríos ponen a prueba la resistencia de la barrera cutánea, lo cual puede provocar diferentes reacciones en la piel.
Las mejores formas de proteger la barrera cutánea
¡Tenemos buenas noticias! Incluso si tu barrera cutánea está dañada, hay solución, y, por lo general, solo conlleva simplificar algunos hábitos.
Aquí tienes algunos consejos para recuperar y proteger la barrera protectora de la piel rápidamente.
Descansar
Esto es aplicable tanto a tu piel como a tus horarios. Además de darle a tu cuerpo el descanso que necesita para recuperarse, deja de usar exfoliantes e ingredientes potencialmente irritantes durante un tiempo. ¡Ah! Y recuerda que el ciclo de renovación de la piel es de entre 21 y 28 días, así que asegúrate de darle a tu barrera cutánea al menos un mes de descanso si quieres que mejore.
Limpiar (suavemente)
Algunos limpiadores que dejan la piel con una gran sensación de limpieza contienen, en realidad, surfactantes muy agresivos. Aunque pueden ser fantásticos para disolver la suciedad y los aceites, también pueden dañar la barrera cutánea.
Los aceites limpiadores son una muy buena opción para limpiar la piel suavemente a diario. Estas fórmulas retiran los aceites no deseados y dejan los que sí necesitas. El resultado es una piel suave, limpia y resplandeciente, sin rastro de la tirantez que provocan los limpiadores más agresivos.
Hidratar
Uno de los pasos más eficaces para regenerar la barrera protectora de la piel es recuperar la hidratación perdida cuanto antes. Si te notas la piel desequilibrada, prueba a añadir cremas hidratantes a tu rutina para ayudarte a recuperar el equilibrio. Además, la hidratación frecuente ayuda a fortalecer la barrera cutánea y a mantenerla sana.
Proteger
Si bien una protección solar adecuada siempre —sí, siempre— es importante, tener la barrera de la piel dañada la hace completamente imprescindible. Tener la barrera cutánea dañada reduce la capacidad de la piel de protegerse de la radiación UV. ¿El resultado? Estrés oxidativo y fotoenvejecimiento. Para protegerte mejor, usa un protector solar de amplio espectro todos los días.
Perfeccionar
Cuando sientas que es hora de retomar una rutina de cuidado de la piel más completa, hazlo poco a poco. Introduce los nuevos productos para el cuidado de la piel de uno en uno y revisa bien su lista de ingredientes.
¡Asegúrate de informarte bien antes de mezclar ingredientes! Algunos de ellos, como el ácido hialurónico o el bakuchiol, se llevan bien con los demás, mientras que otros, como el retinal o los exfoliantes químicos, requieren un poco más de planificación.
¡Pero no hay nada que no sea posible con el skin cycling!
Así, la sequedad y la irritación pueden ser señales de que la barrera de hidratación de la piel necesita un poco de mimo y cariño. Seguir los consejos de este post te ayudará a proteger tu barrera cutánea y mantener tu piel en buen estado durante todo el año. ¡Prepárate para presumir de una piel bonita y sana!
Importante: si bien este artículo lo ha revisado nuestro equipo médico, quien mejor va a poder evaluar el estado de tu piel es tu dermatólogo. No dudes en consultar con él o ella si tienes molestias cutáneas.
Artículo escrito y revisado por:
Belinda es periodista y copywriter creativa. Tras años de experiencia, decidió fusionar sus habilidades de escritura con su amor por el skincare, convirtiéndose en una especialista en la materia. ¿Su imprescindible? Un buen bálsamo de labios.