Cada mañana, nos despertamos con una elección a nuestro alcance: cuidar de nosotros mismos, de nuestros seres queridos y de la belleza que nos rodea. Porque nuestras acciones afectan tanto a nuestra piel como al planeta en el que vivimos.
En una era donde la desconexión se ha convertido en la norma, muchos olvidan la importancia de este equilibrio. Pero basta con despertar y abrir nuestros ojos. La contaminación deja cicatrices, no solo en nuestros rostros, sino también en la tierra.
Queremos cambiar esta narrativa y dirigirnos hacia una belleza más consciente y sostenible. Hoy, te mostramos cómo tú también puedes ser parte del cambio.
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La huella de la contaminación en la piel
A menudo hablamos del estrés oxidativo, que ocurre cuando hay un desequilibrio entre los radicales libres y los antioxidantes en nuestro cuerpo. Este desequilibrio daña las células y acelera el envejecimiento. Ahora, varios estudios demuestran que la calidad del entorno, especialmente la polución, también lo agrava.
Ya lo dice la OMS: “la contaminación del aire es uno de los mayores riesgos ambientales para la salud”. Y es que, de todos los factores externos que cada día interactúan con nuestra piel, la polución es de los más importantes: las micropartículas nocivas del aire se adhieren a nuestros poros, provocando afecciones a corto y largo plazo. Esta relación entre contaminación y piel es innegable.
- Puede dejar la piel más seca, provocando deshidratación o un desequilibrio en el pH.
- Reduce las defensas antioxidantes naturales de la piel.
- Favorece la aparición de problemas cutáneos comunes como la dermatitis y la psoriasis.
- Incrementa la pérdida de firmeza y la aparición de manchas hiperpigmentadas y líneas de expresión.
Hay más factores a tener en cuenta
Envejecer no tiene nada de malo, pero siempre defendemos hacerlo en nuestra mejor piel: una piel saludable y cuidada. La polución nos pisa los talones, y aunque algunas de sus huellas puedan ser invisibles a simple vista, en ISDIN no se nos escapan.
Este año, junto a la Dra. Puig, estudiamos este y otros factores externos del exposoma para comprender cómo nos afecta nuestro entorno e inspirar un futuro sin cáncer de piel. ¿Qué más hay que tener en cuenta? La radiación solar, nuestros hábitos, las altas temperaturas, la falta de sueño, el estrés que provoca una vida sin pausa y una alimentación no muy saludable. Todo suma.
Y aquí surge la pregunta: ¿por dónde empezamos? Con tantos factores a considerar, puede ser difícil priorizar, pero nosotros lo tenemos claro: cuidar nuestra piel con productos que también cuiden todo aquello que la rodea.
En ISDIN, ya hemos comenzado a introducir eco-refills para tus favoritos. ¡Danos tiempo, pronto tendremos más!
Adapta tu rutina a las necesidades de tu piel y del planeta
Es hora de apostar por productos que se adapten a las necesidades cambiantes de tu piel y la protejan de los agentes estresantes externos, incorporando ingredientes que actúan como escudos contra la contaminación. Te dejamos algunas ideas:
Usa un limpiador todo en uno
Limpiar, hidratar e iluminar. Tres pasos que pueden conseguirse con un solo producto. Porque la clave para que tu rutina funcione es construirla sobre un rostro libre de impurezas.
Opta por un limpiador en aceite, capaz de atraer todo lo que tu piel no necesita. ¡Al final del día, es hora de quitarse las partículas de polución de encima!
Recomendación ISDIN: Essential Cleansing, con un un 85% de ingredientes de origen natural y un envase fabricado con un 50% de plástico reciclado.
Introduce un sérum antimanchas
Además de la deshidratación y los signos visibles del envejecimiento prematuro, la contaminación ambiental también puede desencadenar la aparición de manchas oscuras. Esto se debe principalmente a la producción de radicales libres y el estrés oxidativo, que pueden aumentar la producción de melanina. Usa un sérum antimanchas y conviértelo en tu aliado para prevenirlas.
Recomendación ISDIN: Melaclear, el sérum con envase eco-refill que te permitirá recargarlo tantas veces como quieras y ayudar así a reducir el impacto medioambiental asociado a su uso.
Enamórate de una crema hidratante recargable
Introduce en tu rutina una crema hidratante con ingredientes humectantes, como el ácido hialurónico. Será ideal para ayudar a prevenir la aparición de las primeras arrugas en la zona y contrarrestar los efectos nocivos de la polución.
Una piel bien hidratada mantiene una barrera cutánea saludable, capaz de regularse y prevenir la deshidratación. Además, la crema ayuda a sellar todos los pasos anteriores en tu rutina, y lo mejor es que hay una para cada tipo de piel, adaptándose a sus necesidades y entorno.
Recomendación ISDIN: Hyaluronic Moisture, disponible en 3 fórmulas diferentes para piel sensible, mixta o grasa, y normal o seca. Cada una de ellas con eco-refill disponible.
Combate la oxidación con un fotoprotector
El último paso de tu rutina es la regla número 1 de los dermatólogos: hay que usar un fotoprotector de amplio espectro cada día y reaplicarlo cada 2 horas. No solo previene el daño a corto y largo plazo, sino que también combate la polución al proteger la piel de los radicales libres, fortalecer la barrera cutánea y frenar el fotoenvejecimiento.
Te recomendamos un fotoprotector que combine activos antiaging y antioxidantes. Protege, repara y revierte los signos visibles del photoaging en un solo paso.
Recomendación ISDIN: Fusion Water MAGIC Repair, un fotoprotector en compromiso con diferentes proyectos para el cuidado de mares y océanos.
Por cada unidad vendida de cualquier producto de la línea Fusion Water MAGIC, ISDIN contribuirá a retirar el equivalente al peso de su envase en plástico presente en el Mediterráneo.
Todo empieza con un pequeño paso
Así ha sido para nosotros y así queremos que sea para ti. Te animamos a adoptar pequeños hábitos diarios que ayuden a marcar la diferencia:
- ¡Prueba antes de comprar! Se acabó eso de tener productos olvidados en el neceser o en el tocador. Aprovecha las ofertas de tiendas, pide muestras gratuitas o prueba productos de una amiga.
- Apuesta por las recargas ecológicas: no hay nada como enamorarte de un producto y poder recargar su envase.
- Recicla y da rienda suelta a tu imaginación: ¡hay miles de cosas que se pueden hacer con los envases!
Y, sobre todo, cuídate cada día. Solo tenemos un planeta y una piel. Protege ambos y contribuye a un futuro más saludable y sostenible.
Artículo escrito y revisado por:
Belinda es periodista y copywriter creativa. Tras años de experiencia, decidió fusionar sus habilidades de escritura con su amor por el skincare, convirtiéndose en una especialista en la materia. ¿Su imprescindible? Un buen bálsamo de labios.
