La sequedad en las piernas no conoce estaciones, puede aparecer en cualquier época del año. Por eso, es esencial mantener una rutina constante para mimar y darles a tus piernas un boost de hidratación mes tras mes. De esta manera, estarán preparadas para disfrutar de los primeros paseos de primavera, las largas tardes al sol de verano, los días lluviosos de otoño y las noches acogedoras de invierno. Porque unas piernas hidratadas son el complemento perfecto en cualquier ocasión.
Índice de contenidos
¿Por qué aparece sequedad en las piernas?
Seguramente te has preguntado por qué en algunas ocasiones tus piernas lucen más secas y con picazón que en otras. En primer lugar, las piernas son una de las zonas del cuerpo con menos glándulas sebáceas, responsables de producir el aceite natural que mantiene la piel hidratada. Por lo tanto, es natural que tiendan a resecarse con facilidad. En segundo lugar, está tu día a día.
¿Cómo afectan tus hábitos diarios y cómo puedes mejorarlos?
Te duchas con agua demasiado caliente
Largas duchas y baños de agua caliente, suenan tan placenteros como parecen. Sin embargo, existe un detalle importante a tener en cuenta: lavarte con agua a una temperatura excesiva puede ser la causa del problema, ya que el agua caliente puede eliminar los aceites naturales de tu piel, provocando sequedad e irritación.
¿Cuál es la solución ideal? Aunque parezca evidente, optar por duchas con agua tibia y asegurarnos de que no sean más prolongadas de lo necesario. Pero el cuidado no termina aquí; otro aspecto fundamental se presenta cuando sales de la ducha. Secar tus piernas y el resto del cuerpo mediante suaves toquecitos con la toalla en lugar de frotar, también es muy importante.
Usas productos que irritan el pH natural de tu piel
Cada piel es un mundo, por eso, puede que haya productos que funcionen de maravilla para otros, pero que no sean la mejor opción para tu piel, alterando su pH y resecándola.
¿Por qué es tan importante el pH? Pues bien, el pH natural de tu piel tiende a ser ligeramente ácido, normalmente entre 4 y 5.5 (todo lo que está por debajo de 7 en la escala de pH se considera ácido, 7 es neutral y todo lo que supera eso es alcalino).
Este pH ácido influye en la función natural de barrera de tu piel, junto con la producción de lípidos (aceites naturales en la piel). Si utilizas geles o jabones que no respetan ese equilibrio, puedes eliminar los aceites protectores de la piel, lo que a veces puede dar lugar a sequedad e irritación.
¿Cuál es la solución ideal? Si sospechas que tu gel de ducha o el jabón corporal que normalmente utilizas está relacionado con la sequedad, es hora de hacer un cambio y buscar un producto suave que respete el pH natural de tu piel.
Nuestra recomendación: Ureadin Bath Gel y Germisdin Original
Necesitas mejorar tu técnica de depilación
Si alguna vez, después de depilarte, has experimentado picazón, enrojecimiento o inflamación en alguna zona de tus piernas, no te preocupes, puede deberse a tres razones: lo haces con demasiada frecuencia, de manera incorrecta o demasiado rápido. Experimentar estos síntomas no significa que debas dejar de depilarte, ¡pero sin duda puedes mejorar tu técnica!
Si te gusta depilarte con cuchilla, estos son los consejos que debes seguir para evitar la irritación y picazón que a veces la acompañan:
- Evita afeitarte en seco, hazlo siempre con espuma o gel de afeitar para lubricar la piel.
- Di no al agua fría; el agua tibia o templada es la mejor opción.
- No pases la cuchilla en contra de la dirección natural de crecimiento de tu vello.
- Limpia tu cuchilla con frecuencia mientras te depilas.
- Cambia la cuchilla con regularidad y evita la tentación de usar cuchillas viejas, ¡tu piel te lo agradecerá!
Si a estos consejos le sumas una buena sesión de hidratación, el camino hacia una piel saludable e hidratada estará más cerca que nunca. Pero no te preocupes, te depiles o no te depiles, a continuación, vamos a contarte la rutina ideal para decir adiós a la sequedad en tus piernas.
Una rutina con mucha hidratación para tus piernas
Existen numerosas razones por las cuales tus piernas pueden experimentar sequedad o picazón, pero la buena noticia es que también existen numerosas soluciones para devolverles su suavidad y luminosidad.
Primer paso: beber agua para ayudar a mantener los niveles de hidratación naturales de tu cuerpo
¿Sabías que la superficie de tu piel contiene aproximadamente un 30% de agua? (2) Ayudando a mantenerla tersa, elástica y resistente. Sin embargo, si no bebes suficiente agua a diario, tu piel podría no estar recibiendo la hidratación adecuada, lo que a veces resulta en sequedad.
Pero, ¿cuánta agua deberías estar consumiendo? La mayoría de los expertos coinciden en que no necesitamos más líquido que la cantidad que nuestros cuerpos piden, cuando lo piden. (1) ¿El mejor consejo? Escucha a tu cuerpo y consume entre 6 y 8 vasos de agua a lo largo del día.
Segundo paso: exfoliar para eliminar las células muertas de la piel
Ahora que hemos abordado el primer hábito de tu rutina diaria, es hora de adentrarnos en la segunda parte: la exfoliación. En piel seca, la exfoliación puede ser igual de beneficiosa que en cualquier otro tipo de piel. ¿Por qué? Porque al eliminar las células muertas, le das a tu piel la oportunidad de absorber mejor los productos hidratantes y retener la humedad de forma más eficiente.
Y tal vez esta sea la ocasión perfecta para que descubras todas las propiedades de la Urea ISDIN, que en concentraciones superiores al 10% tiene efecto queratolítico, actuando como regenerador celular y ayudando a eliminar las células muertas de la piel.
Aquí viene el consejo clave: no exfolies manualmente en exceso. Una o 2 veces por semana (según tus necesidades), con suavidad, es suficiente para obtener buenos resultados.
Tercer paso: usar tu crema hidratante favorita
Después de la exfoliación, llegamos al tercer paso: ¡la crema o loción hidratante! Y lo sabemos, encontrar una crema o loción hidratante que haga match con tu piel puede ser una tarea difícil, dado que existen muchas texturas y fórmulas entre las que elegir. Pero cuando se trata de combatir la sequedad en las piernas, la respuesta es clara… Necesitas buscar una loción específicamente formulada para combatir la sequedad y proporcionar una hidratación intensa.
Elige una loción corporal hidratante y ligera, de rápida absorción, así evitarás cualquier sensación grasosa o pegajosa después de vestirte. Aplícala una vez al día, idealmente después de exfoliar tu piel o tomar una ducha, para mantener tus piernas secas bien hidratadas.
¿La sequedad no cesa?
Si a pesar de mimar tu piel durante varias semanas, notas que la sequedad no se va, es hora de tener una cita con tu dermatólogo de confianza. Algunas condiciones médicas pueden ser las culpables de una piel seca persistente, y tu dermatólogo será el mejor detective para descubrir si hay una causa subyacente. No solo te ayudará a encontrarla, sino que también te proporcionará recomendaciones personalizadas para combatir la sequedad y picazón.
El tiempo pasa
La piel tiene sus altibajos, como la vida misma. Hay momentos en los que está radiante y otros en los que se siente un poco perdida. Pero en cada una de esas etapas, lo esencial es amarla y cuidarla.
Mantén tus piernas hidratadas mediante el uso regular de una loción hidratante (¡y no olvides el resto de tu cuerpo!). Y, por supuesto, presta atención a cualquier cambio en la apariencia o textura de tu piel para poder comentarlo con tu dermatólogo. ¡Cuidar de tu piel en el presente es darle un abrazo a tú yo futuro!
Referencias:
- Water, Hydration and Health https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC2908954/
- Atopic Dermatitis and Water: Is There an Optimum Water Intake Level for Improving Atopic Skin? https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC9954916/
- https://www.actasdermo.org/es-xerosis-articulo-S0001731008761714
Artículo escrito y revisado por:
Belinda es periodista y copywriter creativa. Tras años de experiencia, decidió fusionar sus habilidades de escritura con su amor por el skincare, convirtiéndose en una especialista en la materia. ¿Su imprescindible? Un buen bálsamo de labios.