A la hora de crear una rutina de belleza, es fácil pensar que cuanto más productos utilices, mejores serán los resultados. ¡Pero nada más lejos de la realidad! En cosmética, la unión no siempre hace la fuerza. Cada piel tiene sus propias necesidades y características, y por eso es fundamental prestar atención a los ingredientes que usas y cómo los combinas.
Para ayudarte, hemos consultado a nuestros expertos y hoy te contamos qué ingredientes forman un equipo ganador y cuáles es mejor que trabajen por separado.
Índice de contenidos
¿Qué es un ingrediente activo en skincare?
Los ingredientes activos son aquellos que aportan los beneficios principales y los resultados más visibles de un producto, como su poder iluminador, antioxidante o hidratante. La mayoría de los ácidos, vitaminas y antioxidantes pertenecen a esta categoría. Por su parte, los demás ingredientes, conocidos como excipientes, tienen funciones complementarias, como estabilizar o mezclar la fórmula, además de darle al producto su forma y textura.
Cuando se combinan correctamente, los ingredientes activos trabajan en armonía para potenciar los resultados que deseas para tu piel. Sin embargo, no todas las combinaciones son iguales, y algunas pueden requerir un cuidado especial.
Ingredientes activos que sí puedes combinar
Vitamina C + ácido hialurónico para un rostro firme y saludable
Ambos forman una pareja ganadora. Por un lado, la vitamina C es un antioxidante comprobado que ayuda a proteger la piel de los radicales libres. Al aplicarla de forma tópica, ilumina y refuerza la firmeza del rostro. Por otro lado, el ácido hialurónico ayuda a mantener la hidratación.
¿Cómo puedes aprovechar al máximo este dúo dinámico? Aplícalos en el orden correcto. La vitamina C, con su textura ligera y fluida, es perfecta para actuar sobre la piel limpia. Por eso, después de limpiar tu rostro y aplicar tu contorno de ojos, utiliza un sérum de vitamina C como el paso 3. Luego, completa tu rutina con una crema que contenga ácido hialurónico como el paso 4, para sellar la hidratación y potenciar los beneficios.
Vitamina C + melatonina para una acción antioxidante
¿Sabías que la melatonina es clave para estimular las defensas antioxidantes de tu piel mientras duermes? Al combinarla con vitamina C, no solo ayudas a combatir los factores de estrés oxidativo diarios, sino que también aportas una luminosidad natural a tu rostro. Opta por un sérum nocturno que combine estos potentes antioxidantes para potenciar los procesos naturales de reparación de tu piel mientras disfrutas de un descanso lleno de belleza.
Retinal + ácido hialurónico para rejuvenecer
El retinal, un potente derivado de la vitamina A, estimula la síntesis de colágeno, acelera el proceso de renovación celular y mejora visiblemente la textura de la piel, reduciendo arrugas y líneas de expresión. Este proceso puede dejar la piel más firme, suave y con un aspecto rejuvenecido. Sin embargo, su uso puede causar sequedad o sensibilidad, especialmente en las primeras aplicaciones.
Para contrarrestar esto, el ácido hialurónico se convierte en el compañero perfecto. Este poderoso ingrediente actúa como un imán para la hidratación, atrayendo y reteniendo agua en las capas más profundas de la piel, dejando una sensación de suavidad y elasticidad. Juntos, el retinal y el ácido hialurónico trabajan en perfecta armonía.
Retinal + niacinamida para equilibrar
Tanto el retinal como la niacinamida son vitaminas. El primero es un derivado de la vitamina A y el segundo es una forma de vitamina B3 muy bien tolerada por la piel. Ambos ingredientes son conocidos por su eficacia y versatilidad, ofreciendo beneficios como la mejora de las arrugas, la renovación celular y el refuerzo de la hidratación.
Además, la niacinamida es clave para estabilizar la barrera cutánea y proporcionar un efecto calmante, lo que resulta especialmente útil si estás introduciendo el retinal en tu rutina por primera vez, ayudando a minimizar posibles molestias durante el proceso de retinización.
Retinal + bakuchiol para una acción antiaging
A menudo considerado una alternativa más suave a los retinoides, el bakuchiol, con sus propiedades antioxidantes naturales, complementa perfectamente los efectos del retinal. Esta combinación es ideal para quienes buscan resultados potentes sin comprometer la barrera natural de la piel.
¿La mejor parte? Puedes usarlos por separado en tu rutina, o elegir un sérum que combine ambos ingredientes para aprovechar todos sus beneficios rejuvenecedores en un solo paso.
Ingredientes activos con los que hay que tener cuidado
Vitamina C + retinal
La vitamina C y el retinal son como el dúo perfecto para el cuidado de tu piel, siempre que cada uno tenga su momento. La vitamina C es ideal para las mañanas, protegiendo tu piel de los factores externos, mientras que el retinal es el aliado nocturno que trabaja mientras duermes para renovar y suavizar la piel. Usarlos en momentos distintos no solo es práctico, sino que también ayuda a maximizar sus beneficios, dejando tu piel más luminosa, suave y con un aspecto rejuvenecido.
Sin embargo, si es tu primera vez usando retinal, es importante ir con calma. Durante el período de retinización, puede ser mejor evitar la vitamina C por la mañana para no sobrecargar tu piel. Una vez que se haya adaptado, podrás reincorporarla sin problemas. Y no olvides: ¡el protector solar es imprescindible!
Vitamina C + niacinamida
Estas dos funcionan mejor solas que combinadas. La razón principal es que tienen necesidades diferentes para funcionar de manera óptima: la vitamina C es más efectiva y estable en un ambiente ácido, mientras que la niacinamida trabaja mejor en un pH neutro.
Si mezclas ambos ingredientes, sus propiedades pueden neutralizarse entre sí, reduciendo los beneficios que ofrecen. Por eso, es mejor utilizarlos por separado, en diferentes momentos del día o en días alternos, para que cada uno pueda destacar en lo que mejor sabe hacer.
Retinal + ácido glicólico
El ácido glicólico es un AHA (alfahidroxiácido) muy potente que puede ayudarte a lograr una piel más luminosa y uniforme. Además, es excelente para reducir líneas de expresión y manchas, dejando tu rostro con un aspecto renovado y radiante.
Eso sí, si estás usando retinal, es mejor no combinarlos el mismo día. Juntos pueden causar irritación o descamación, dependiendo de lo sensible que sea tu piel. La mejor opción es alternarlos en días diferentes, ya que el retinal por sí solo tiene una acción renovadora muy potente que puede darte grandes resultados sin necesidad de añadir exfoliantes al mismo tiempo.
Ahora que ya sabes cómo combinar los ingredientes activos en tu rutina, ¡es hora de ponerlo en práctica! ¿Nuestro último consejo beauty? Prueba la técnica del skin cycling. Este método te ayudará a estructurar el uso de los activos de forma eficaz, maximizando sus beneficios y manteniendo tu piel en su mejor estado.
Artículo escrito y revisado por:
Belinda es periodista y copywriter creativa. Tras años de experiencia, decidió fusionar sus habilidades de escritura con su amor por el skincare, convirtiéndose en una especialista en la materia. ¿Su imprescindible? Un buen bálsamo de labios.