Como diría Antonio Machado: ‘’Caminante, no hay camino, se hace camino al andar’’. Tus pies, fieles compañeros de tus pasos; te han llevado de un lugar a otro sin quejarse, bailan, sobreviven a largas horas de eventos y, sin embargo, a menudo se convierten en los grandes olvidados en el mundo del skincare.
Pasan mucho tiempo cubiertos, los talones se agrietan y no siempre les damos la hidratación que necesitan. A lo largo del año, es importante devolverles el favor y asegurarnos de que luzcan tan bien como se merecen. Si tienes los talones agrietados, quédate, vamos a contarte todo lo que necesitas saber para repararlos.
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¿Conoces la piel de tus pies?
En ella, hay un mayor número de células adiposas (ricas en lípidos) que en el resto del cuerpo. Esto hace que la piel de tus pies sea mucho más gruesa, amortiguando cada paso al caminar. De hecho, ¡es hasta 50 veces más gruesa que la piel de la mejilla! Sin embargo, también contiene menos grasa que otras partes de tu cuerpo. Esta característica la hace propensa a secarse y necesitar una hidratación adicional.
Un ejemplo claro de esto son los talones agrietados. A todos nos ha pasado: llega el día de un evento importante, sacamos nuestras sandalias favoritas del armario y ¡sorpresa!, nuestros talones no están en su mejor momento para lucirlas.
¿Por qué se agrietan tus talones?
Los talones aguantan mucho a lo largo del día, son una de las zonas del cuerpo que mayor presión soporta y están sometidos a una fricción considerable. Por eso, mantenerlos hidratados es clave para su bienestar.
Cuando la piel de los pies está seca y dura, se produce una alteración de la dermis en la que la piel empieza a desgarrarse, llegando a romperse. Debido a la falta de hidratación y a la pérdida ocasional de elasticidad, aparecen grietas que a veces pueden ser dolorosas.
Si notas descamación, picor, enrojecimiento o rugosidad y grietas en tus talones, es hora de actuar.
Los secretos para reparar talones agrietados y secos
1. Mantén tus pies limpios
Puede parecer obvio, pero no secarse adecuadamente los pies y no mantenerlos limpios puede crear el ambiente ideal para que se produzcan infecciones por hongos. Sobre todo en verano, cuando tendemos a utilizar calzado abierto y el calor adicional puede hacernos sudar.
Para evitarlo y combatir los cambios que enfrentan estación tras estación, esta es la solución: lavar tus pies a diario con un limpiador suave e hidratante que no reseque la piel. Para prevenir los talones secos y agrietados, es crucial mantener intacta la barrera protectora contra la humedad de tus pies. Todo comienza aquí.
2. Exfolia tus talones después de bañarte o ducharte
La exfoliación será tu gran aliada, ya que ayuda a eliminar la piel muerta y a prevenir la acumulación gruesa y áspera en los talones y las plantas de los pies. Pero recuerda, es mejor evitar limas o productos muy abrasivos, pues podrían empeorar la irritación o raspar tus talones.
¿El truco? Apostar por ingredientes como la Urea ISDIN y su acción queratolítica, en forma de geles y cremas. Una textura gel oil no solo será amable con tus pies, sino que también proporcionará una acción hidratante. Aplica el producto sobre tus talones después de limpiar la zona y ¡listo!
3. Utiliza una crema hidratante específica para la zona
Aunque cada estación tiene sus desafíos, tus talones suelen pasar por su peor momento en invierno, ya que las temperaturas son frías y hay menos humedad en el aire. Pero, ¿qué impacto tiene este clima en tus pies? Menos humedad hace que la piel se vuelva más seca, por lo que es más probable que tus pies se descamen y se agrieten durante estos meses.
Si quieres mantener la piel de tus pies suave y tersa durante todo el año, la clave está en hidratarla diariamente.
¿El mejor consejo? Introducir en tu rutina un hidratante para pies con textura gel oil, que ayude a mantener niveles óptimos de humedad y con la que tu piel se sienta más suave. Ingredientes como la alantoína, el pantenol, la manteca de karité y la urea son ideales para ayudar a reparar la sequedad y las grietas.
Spoiler: dependiendo de la concentración, la urea ofrece más de un beneficio. En concentraciones bajas, renueva, hidrata en profundidad y suaviza la piel, mientras que en altas concentraciones, brinda una exfoliación poderosa para suavizar hasta las áreas más ásperas.
En esta rutina, tú pones las reglas
Si hablamos de talones y pies, no existe el momento perfecto para hidratarlos, ¡ya que todos son válidos! Texturas gel oil como las de Ureadin Podos se absorben inmediatamente, lo que las hace perfectas después de salir de la ducha, la exfoliación o antes de irte a dormir.
Tú decides cuándo. ¿Un momento que nos encanta? En el sofá mientras ves una película o tu serie favorita, así podrás relajarte y también hacerte la manicura o ponerte tu mascarilla facial favorita.
¿Qué más puedes hacer por tus pies?
Esta pequeña rutina de 3 pasos no podría completarse sin unos últimos consejos, porque a veces, la sequedad también puede verse impulsada por nuestros hábitos:
- Usa calcetines hechos de tejidos naturales, como lana o algodón, ya que los tejidos sintéticos pueden hacer que tus pies suden más.
- No utilices calzado demasiado apretado, así evitarás la fricción en exceso.
- Si vas a estrenar sandalias este verano, pruébalas antes en casa. No hay nada más molesto que una herida por fricción en unos zapatos que te mueres por poner. Si notas fricción en alguna zona, refuerza la zona con crema antes de usarlas.
- Protege tus pies del sol. Probablemente, sea una de las zonas donde menos nos echamos fotoprotector, ¡pero no hay excusa válida! Es tan importante proteger la piel de tus pies como cualquier otra parte del cuerpo.
Nuestra vida no es otra cosa que las experiencias que vivimos. Y al final, nuestros pasos son el camino que hemos recorrido. Por eso, es hora de darle a tus pies el mismo amor y atención que le das al resto de tu cuerpo. Así, los talones secos y agrietados serán parte del pasado.
Artículo escrito y revisado por:
Belinda es periodista y copywriter creativa. Tras años de experiencia, decidió fusionar sus habilidades de escritura con su amor por el skincare, convirtiéndose en una especialista en la materia. ¿Su imprescindible? Un buen bálsamo de labios.